Cada vez es más frecuente ver hombres y mujeres de distintas edades con un tatuaje visible: desde el signo del infinito en la muñeca de la mano hasta figuras y personajes míticos en cualquier parte del cuerpo.
Lo que hace unas décadas era visto como un signo de rebeldía o contra las normas sociales, hoy es más frecuente que se reconozca como un arte y también representa un negocio.
La industria ha crecido. En la Ciudad de México hay al menos 438 negocios dedicados al tatuaje, según el Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas del Inegi, y un número importante hizo su registro en los últimos cinco años.
Con el boom de los tatuajes, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) emitió este año una guía para que tatuadores, micropigmentadores y perforadores obtengan tarjeta de control sanitario, un documento que debe tener toda persona que realice tatuajes.
Un tatuaje es una marca permanente en la piel que se hace con una aguja y tinta para dejar plasmado un diseño, dibujo, letras o cualquier otro tipo de marca. Comúnmente se usan máquinas que realizan de 50 a 300 piquetes por minuto en la piel dejando la tinta en la dermis, la segunda capa de este órgano.
Al tratarse de una herida, tanto la persona que tatúa, como el cliente, se deben tomar medidas de higiene, llevar cuidados y tomar en cuenta las posibles reacciones que puede tener un cuerpo, desde una posible alergia a la tinta, una mala cicatrización, una infección o inclusive la transmisión de una enfermedad como la hepatitis.
EXPLORA CDMX platicó con varias personas que tatúan en estudios formalmente establecidos para preguntarles sobre la experiencia en su práctica y qué consejos pueden dar a las personas que desean hacerse un tatuaje.
Para este trabajo, se entrevistó por separado a la artista de tatuaje Alexandra Salander, a los artistas de Akuma tatoo and piercing:Daniel SLG, Abeja, Rako y Alonso Guerra; y a Israel Huarte.
1.- No tatuar en lunares o manchas
Tal vez te quieres tatuar para ocultar un lunar que no te gusta o una mancha, pero no es recomendable. Toma en cuenta que dependiendo del color, es probable que no se pueda cubrir un lunar o mancha de nacimiento.
Un lunar no se debe cubrir con un tatuaje porque no se sabe si va a crecer o si es signo de alguna enfermedad. Es mejor que primero vayas al dermatólogo o con otro médico especializado que te haga saber si no hay riesgos.
2.- No tatuarte si tu piel está irritada
El tatuaje es una herida en la piel, por lo que debe estar hidratada y en buen estado, sin irritaciones ni heridas sin sanar.
3.- Conocer el trabajo de la persona que tatúa
Revisa el perfil de redes sociales de la persona que te va a tatuar y fíjate no sólo de cómo se ve el tatuaje recién hecho sino cómo se ve una vez que ha cicatrizado. A veces, la tinta se expande o no se ve tan brillante cuando está recién hecho que un mes después.
4.- La persona adecuada
Elige a la persona que realiza el estilo que deseas tatuar. Hay quienes dominan muy bien los tatuajes en blanco y negro con escala de grises o quienes hacen líneas finas, otras personas que se han especializado en el color o que perfilan muy bien figuras de animales, pelaje, etcétera. Si es una persona ética y no domina el estilo que quieres, te va a recomendar con un colega que sí sepa.
5.- Ambiente limpio
Una de las primeras cosas que debes observar es que el lugar donde se va a hacer el tatuaje esté limpio y se debe cuidar que no haya riesgos de contaminación cruzada.
6.- Insumos nuevos
La persona que te va a tatuar debe mostrarte la aguja en un empaque sellado para probar que es nueva, el tipo de máquina que va a usar y que se ponga guantes.
7.- Cuidar la herida del tatuaje
Evita exponerte al sol, no uses camas de bronceado o tratamientos de láser en esa parte del cuerpo. Evita tatuarte si estás recién bronceado o acabas de llegar de tomar un baño de sol y tu piel está irritada.
La persona que tatúa debe darte consejos de limpieza y humectación para ayudar a la cicatrización, que tarda unos 15 días, pero los cuidados se pueden extender hasta por dos meses.
8.- Prevenir que no haya infecciones
La herida de un tatuaje se puede infectar si no tienes los cuidados necesarios. La cicatrización puede ser hipertrófica y esto puede hacer que la tinta quede expandida. Cuida que el tatuaje no se convierta en una mala experiencia.
9.- Materiales
Lo bueno va a costar más caro. Así que, si te cobran 500 pesos por un tatuaje, es una bandera roja sobre el tipo de trabajo que te van a hacer.
Hay diferentes tonalidades de tintas, inclusive en las tintas negras, hay unas que quedan como color gris, otras que quedan como azul, hay unas que quedan como negro sólido. Hay tintas negras que no se pueden utilizar para líneas porque se expanden y sólo se pueden utilizar para rellenos sólidos.
Las tintas de colores pueden causar ciertas reacciones en la piel.
10.- La edad
Si eres menor de 18 años y te quieres tatuar, toma en cuenta que tu cuerpo aún seguirá creciendo y es probable que la piel se expanda y el tatuaje no luzca igual en unos años.
11.- Tu estado de salud
Las personas que tienen alguna enfermedad como diabetes, anemia, leucemia o personas o que tengan algún tipo de cicatrización diagnosticado no son idealmente aptas para hacerse un tatuaje.
12.- No te tatúes si has bebido alcohol
Es común que haya personas que quieran tatuarse en medio de una borrachera. Esto no es recomendable por salud y porque es una marca permanente en tu cuerpo. Recuerda que remover un tatuaje es posible, pro el proceso es caro, es doloroso y quedará una cicatriz en tu piel.
Si después de estos consejos, insistes en querer hacerte uno o más tatuajes, adelante. Sólo toma en cuenta que es para toda la vida y que debes elegir a la persona adecuada para que haga de tu experiencia algo memorable.
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